Herida cortante y fractura del hueso frontal, con neumoencéfalo y hematoma subdural. «El informe médico resalta la grave lesión que sufrió una adolescente de 15 años mientras permanecía durante la madrugada, fuera del horario permitido para menores de edad, en la discoteca más importante y tradicional de este balneario.
La menor fue atendida por un equipo de emergencias médicas en el interior de la disco, donde había una gran concurrencia de jóvenes. Luego fue derivada al Hospital Municipal de Pinamar, donde los estudios constataron la gravedad de las lesiones, por lo que pronto y con consentimiento de los padres de la víctima se dispuso el traslado al Sanatorio de La Providencia, de la Capital Federal, preparado para cuadros de alta complejidad.
Los familiares de la adolescente, oriundos de la Capital Federal y que estaban de vacaciones con ella, hasta ayer no habían realizado denuncia alguna. Por eso, la policía comunal de Pinamar tomó intervención de oficio para recabar información en el escenario del incidente para determinar cómo y en qué circunstancias ocurrieron los hechos.
Federico Fourquet, representante legal de la discoteca Ku, consideró ayer que es imposible que se haya caído mampostería porque la cubierta del complejo es de chapa. «Pudo haber sido un botellazo u otra cosa», explicó.
El caso vuelve a poner en escena una problemática tradicional de la actividad nocturna, en especial en los destinos turísticos de la costa atlántica durante el verano. Una de las cuestiones preocupantes y cotidianas es el consumo de alcohol en exceso. Otra, la presencia de menores en discotecas y bares más allá de las 23, horario tope establecido para las matinés, que están previstas para chicos de 14 a 17 años.
La asistencia para la adolescente lesionada en la cabeza se pidió a las 4 de este sábado, horario en que la discoteca estaba casi completa, como ocurre a diario en ese local y más aún durante los fines de semana.
La menor había concurrido con algunas amigas y cayó desvanecida dentro de los límites del complejo, ubicado casi sobre la playa. Al ver sangre en su rostro, quienes la acompañaban pidieron asistencia médica. Los profesionales que llegaron al lugar controlaron la herida y realizaron el traslado de la víctima hasta el hospital local.
«[La paciente] No recordaba lo sucedido en la discoteca», precisó el neurólogo Walter Ciancio, que la atendió a poco de su ingreso en el Hospital Municipal de Pinamar. Destacó que a simple vista se percibía una herida por la que «se veía hasta el hueso del lado frontal izquierdo».
Por estas horas, la paciente sigue sometida a cuidados intensivos, lo que además incluye la realización de tomografías y otros estudios. Se explicó que el cuadro de neumoencéfalo implica la presencia de una burbuja de aire en el área cerebral y el hematoma subdural es una acumulación de sangre por debajo del cráneo. Según los resultados se determinarán los pasos a seguir.
En los últimos años se afianzó la tendencia de grupos de adolescentes que llegan sin la compañía de sus padres. A veces, por apariencia física, otras porque personal del establecimiento no les limita el ingreso y el Estado no está todo lo presente que debería, ingresan en locales en los que sólo se permite presencia de mayores de edad.
Apenas conocido el caso de la adolescente herida, el titular de la ONG Defendamos Buenos Aires, Javier Miglino, anunció que hoy presentarán en La Plata una nota dirigida al gobernador Daniel Scioli para que la administración provincial disponga la inmediata clausura de la discoteca hasta que se determine cómo resultó accidentada esta menor y, además, pedirán que no se la vuelva a abrir al público hasta que se confirme que es un espacio seguro.
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