Hace poco menos de siete meses, unos treinta vecinos de la zona del Club Independiente firmaron un escrito entregado en la Municipalidad para poner de manifiesto los inconvenientes que se registraban en actividades organizadas en instalaciones de la entidad. La presentación fue realizada el 23 de abril y en este sentido, el bloque de concejales del Frente Renovador llevó este tema el 27 de junio a una sesión del Concejo Deliberante, oportunidad en la cual solicitó al Departamento Ejecutivo que «a través de la Secretaría de Seguridad se investiguen las denunciadas efectuadas por vecinos del Club Independiente de nuestra ciudad».
Entre muchos otros aspectos, se hizo referencia a «enfrentamientos con la policía», además de ruidos molestos, «peleas a la salida» e incidentes que continúan siendo motivo de preocupación, especialmente considerando que en la madrugada del domingo murió en el lugar un hombre de 32 años que recibió un disparo.
El texto indica lo siguiente:
«Nos dirigimos a usted con el fin de informarle una situación que viene ocurriendo hace ya casi dos años. Somos vecinos del Club Independiente, en calle Gomila 750. Dicho club organiza fiestas nocturnas los fines de semana, hecho que ocasiona muchísimo ruido a altas horas de la noche, siendo imposible dormir durante esas horas.
«No sólo alquilan el salón para eventos como casamientos o fiestas privadas, sino que organizan, o alquilan a quienes organizan, recitales, eventos que finalizan muy tarde y que el sonido de los mismos se puede escuchar a muy alto volumen en todas las viviendas linderas y muchas veces en un radio mayor a dos cuadras a la redonda.
«Además como consecuencia de dichas fiestas -sobre todo los recitales- ocurren peleas a la salida, gritos, botellas rotas, defecaciones, roturas, vómitos y en ocasiones, como ocurrió cuando trajeron al grupo Amar Azul, enfrentamientos con la policía.
«Solicitamos a quien corresponda interceda para que se cumplan las ordenanzas de ruidos molestos, que cumplan las medidas que se requieren en la habilitación de este tipo de actividades, para que actividades privadas no intercedan con el descanso y la tranquilidad de decenas de vecinos, trabajadores, gente mayor, niños pequeños; sólo pedimos poder convivir de manera tranquila y civilizada.
«Además pedimos que se regule el horario que se alquila la cancha de fútbol, ya el verano pasado se alquilaba hasta altas horas de la noche (muchas veces hasta la una de la mañana), con lo que era difícil descansar, ya que por la estructura del tinglado de la cancha, los gritos, silbatos y ruidos típicos de esta actividad, se multiplican y pueden ser escuchados por un radio de más de cien metros a la redonda. Previniendo que en temporadas de primavera o verano próximas ocurra lo mismo, solicitamos dicha regulación».
El 26 de abril realizaron un agregado, a un pedido de algunos vecinos linderos al club. Indica que: «Le informamos también que la colocación de lonas plásticas al costado de la cancha del club ocasionan constantes ruidos y los días de viento se agrava la situación; fue avisado el concesionario de la cancha para que se encuentre una solución, pero dicha situación no fue resuelta«.
En consultas realizadas en el barrio, se confirmó que las lonas mencionadas fueron retiradas, pero las restantes dificultades no tuvieron hasta el momento una respuesta que permita contar con una solución definitiva ante el reclamo.
En el escrito, los autores incluyen nombres completos y número de documento, si bien piden a las autoridades mantener en reserva los datos «para evitar cualquier conflicto de carácter personal con los responsables del club citado».
Fuente: www.lavozdelpueblo.com.ar
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