Las mediciones oficiales indican que se cumplió con los índices establecidos; el nivel más alto se registró en Figueroa Alcorta, frente a la Facultad de Derecho
A pesar de que algunos vecinos se quejaban desde temprano por el rugido de los motores de los automóviles que participarán hoy de la competencia de Súper TC 2000 en el circuito callejero de Recoleta, en el gobierno porteño aseguraron que las mediciones de ruido que hizo la agencia oficial ambiental están dentro de los parámetros permitidos.
Ayer desde temprano comenzaron las pruebas de clasificación – de lo que se informa en la Deportiva- y miles de personas se acercaron para ver pasar a los bólidos a toda velocidad. «De las mediciones se puede concluir que los mayores ruidos se producen frente a la Facultad de Derecho, donde no hay residencias particulares, y en la esquina de Avenida del Libertador y Agüero. La colocación de pantallas acústicas absorbentes de sonido lograron reducir el impacto en avenida Figueroa Alcorta y Tagle más de cinco decibeles, según las mediciones oficiales.
En Libertador y Ayacucho también , al parecer, también demuestran ser eficaces, al mantener el ruido en niveles menores a los 90 dB. «Se espera, sin embargo, que durante la carrera (hoy) estos valores sean ligeramente superiores», indicó Javier Corcuera, presidente de la Agencia de Protección Ambiental porteña.
Según las mediciones, los picos se registraron a la altura de la facultad, en donde se midieron 107 dB. Cabe recordar que los ruidos constantes por encima de 70 dB empiezan a ser dañinos para la salud.
El circuito callejero está situado en las avenidas Del Libertador y Figueroa Alcorta, y las calles Ayacucho y Tagle. La circulación vehicular se reanudará mañana, luego de que termine la competición.
Cabe recordar que, tras una acción de amparo, la justicia porteña obligó al gobierno a no cobrar peaje en la Autopista Illia mientras dure la carrera, ya que es una de las vías alternativas de circulación durante este fin de semana largo.
Ayer, el secretario de Deportes porteño, Francisco Irarrazával, respondió a las críticas que anteayer le habían hecho desde el gobierno nacional cuestionando la seguridad del circuito. «Suena a oportunismo político». Y agregó: «Atrás de esto está la Federación Internacional del Automóvil, la Confederación Argentina de Automovilismo, que firman papeles que permiten que esto se haga. Las medidas de seguridad están tomadas».
Ayer, la presidenta de la asociación Madres del Dolor, Silvia Irigaray, se sumó a las críticas : «Si era inevitable realizar y publicitar una carrera callejera, por lo menos habría que haber realizado durante todo el evento una campaña de difusión de seguridad vial para generar conciencia, porque si no al día siguiente aparece un inconsciente que vio la carrera por la tele y se le ocurre ir a 250 kilómetros por hora en Figueroa Alcorta»..
Fuente: La Nacion
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