Advierten sobre “la triste realidad de los edificios escolares inhabitables”

El Estado provincial sigue sin resolver los problemas edilicios de cientos de establecimientos escolares, entre ellos, el de la escuela primaria “Juan Martín de Pueyrredón”, de Paraná, cuyo edificio “tiene aulas inhabilitadas por deficiencias en mampostería, instalaciones eléctricas deficientes, y tanques de agua con suciedad ilimitada”, afirmó a AIM el secretario Gremial de la seccional Paraná de la Asociación Gremial del Magisterio de Entre Ríos (Agmer), Daniel Ruhl.

Párrafo aparte dedicó el sindicalista a la secundaria Pueyrredón, cuyos alumnos fueron trasladados hace años a la sede de la colegio número 1 Domingo Faustino Sarmiento, sito en calle Garay, de Paraná, con la promesa de resolver “en forma inmediata, la construcción del edificio propio, pero aunque el gobierno se comprometió a solucionar el tema y anunciar el plan de obras en 2011, todo está como era entonces, y hoy ya estamos en 2013”,

En diálogo con esta Agencia, Ruhl afirmó que “la realidad nos choca cada día, cuando vamos a las escuelas y recorremos sus espacios, cuando los tienen. Y esto es muy duro, ya que son escuelas, con nombre, número y lo más importante, personas que las constituyen, pero no lugares que los alberguen”.

El caso de la escuela primaria “Martín de Pueyredón”, que funciona en un edificio histórico en la Bajada de los Vascos, “es muy viagra generic grave”, advirtió e ironizó: “sin embargo, las autoridades utilizaron medidas intimidatorias con los docentes para que fueran a trabajar bajo amenaza de descuento los días de paro. No reflexionaron que en esa escuela las aulas están inhabilitadas por deficiencias en mampostería a punto de caerse; el taller no se puede ocupar; y las instalaciones eléctricas son deficientes”.

Por eso consideró

que “cargar responsabilidades sobre las cabezas de los docentes es sencillo, ya que con resoluciones y circulares, el gobierno cree resolverlo. Pero, de las condiciones inhumanas en las que coloca a los niños, docentes y personal, eso no está en los cálculos de los funcionarios, que seguramente no envían sus hijos a escuelas públicas. Es que era necesario iniciar el ciclo lectivo sin importar los riesgos que conllevan estas estructuras, que son una trampa de techos húmedos, agua contaminada y paredes electrificadas”, ironizó.

Ruhl destacó que “nunca se construyó como reza el eslogan del gobernador (Sergio Urribarri). Lo cierto es que no resolvió los problemas y los que dicen resolver, tienen deudas pendientes o plazos vencidos”, fustigó.

Fuente: www.aimdigital.com.ar
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