Permiten que haya colectivos de hasta 13 años de antigüedad

El límite legal es 10 años. De cumplirse, saldrían de circulación uno 4 mil vehículos.

El Gobierno nacional volvió a permitir que sigan circulando colectivos de hasta 13 años de antigüedad, pese a que el límite legal son diez años.

Así lo decidió con el decreto 123, publicado ayer en el Boletín Oficial. En ese texto dicen que, si bien el tope de antigüedad es de diez años según la ley nacional N° 24.449, como las empresas de transporte no pueden renovar sus unidades por la situación económica, se les permitirá seguir usando vehículos de hasta 1996 inclusive.

Esta prórroga por cuestiones económicas se viene repitiendo desde 2001. Según informaron en la Cámara Empresaria del Transporte Automotor (CEAP), las 135 líneas que unen Capital y GBA cuentan con una flota de 9.700 vehículos, que tienen una antigüedad promedio de unos ocho años. Con la nueva prórroga, saldrán de circulación unas 200 unidades (de hecho, varias ya fueron reemplazadas), pero si se cumpliera el límite de los diez años deberían dejar de usar unos 4.000 vehículos. Lo ideal, dicen, sería ir renovando un 10% de la flota cada año.

La decisión tiene un costado polémico. Es que si bien por un lado se garantiza la continuidad del servicio, al permitir que sigan circulando unidades con un alto desgaste aumentan los riesgos de accidentes y de contaminación. Por ejemplo, un estudio publicado en abril por la Defensoría del Pueblo de la Ciudad demostró que los colectivos superan en hasta un 50% el nivel permitido de ruidos. En ese momento tomaron mediciones en cinco barrios porteños (Monserrat, San Nicolás, Constitución, Balvanera y Caballito), y encontraron que algunos colectivos emitían hasta 125 decibeles, cuando el máximo tolerable es 83, según lo estipulado por la ley del Ruido (la N° 1.540).

La incógnita es qué pasará el año que viene. Es que, según CEAP, de cumplirse con el límite ya no de los diez sino de los 13 años, el año que viene deberían salir de circulación más de 1.000 colectivos. Parece difícil que durante 2009 las empresas de transportes vayan a invertir en la compra de tantas unidades. Es que un vehículo nuevo cuesta no menos de 250.000 pesos.

Esto, en el marco de años de una política de subsidios para evitar encarecer las tarifas. El año pasado, las empresas de transporte recibieron casi 6.200 millones de pesos. Este año, con la suba del boleto de 90 centavos a 1,10 peso, la Nación piensa ahorrar 800 millones.