Aumentan las quejas vecinales por los ruidos molestos y apuntan a la refinería

Al atravesar la avenida 122 hacia el lado del barrio El Dique, se escucha un persistente ruido similar al que hacen las turbinas de un avión. El fenómeno, si bien no es extraño para los vecinos de esa zona, en los últimos días los sorprendió por el nivel “ensordecedor” que alcanzó en determinadas franjas horarias. La calma de esa zona, caracterizada por casas sencillas, está alterada por un constante y molesto zumbido que por momentos se vuelve insoportable, según cuentan los vecinos.
“A la noche es cuando más se escucha, uno no se puede dormir y cuando concilia el sueño, se despierta porque es como si se escuchara el arranque de un inmenso motor”, afirma un vecino de 47 y 124. Otras personas del barrio indican que el ruido también se escucha durante el día y en determinados horarios los obliga a levantar el volumen de la radio o la televisión porque si no, no alcanzan a escuchar los programas.
“Esta es una zona de gente de trabajo, casi todos nos levantamos muy temprano y es imposible descansar con este nivel de ruido”, señala una vecina de 48 bis y 129. CADA VEZ MAS INTENSO Según describen los vecinos consultados, el ruido se hizo más intenso en los últimos 10 días y, pese a que muchos expresaron su preocupación, hasta el momento nada cambió, aunque pareciera que pronto llegue una solución, según se desprende de las declaraciones de los voceros de la refinería.
“Antes se hacían inspecciones cada tanto y las cosas mejoraban un poco, pero ahora hace tiempo que no pasa nada de eso; es como si la Destilería funcionara sin ningún tipo de controles”, sostiene un vecino que vive cerca del Hospital Naval. Aunque no pueden asegurar que tenga alguna relación con la Destilería , en las últimas horas los vecinos dicen que aumentaron los casos de personas afectadas por alergias, resfríos y bronquitis. Ante la consulta que se formuló a representantes de la Destilería YPF, se informó que un desperfecto técnico afectó un compresor de hidrógeno que hace que se liberen más gases hacia la antorcha y, eso a su vez, produce el ruido del que se quejan los vecinos de El Dique.
“El impacto que ocasiona el desperfecto es solo auditivo porque se queman más gases; es una situación pasajera que se solucionará en un tiempo prudencial”, apuntó el vocero de la empresa, tratando de llevar cierto alivio a los vecinos del barrio que estaban por demás preocupados por la creciente ola de ruidos permanentes. Después de aclarar que el desperfecto en el compresor de hidrógeno se solucionará en las próximas horas, se dejó en claro que las maniobras de la Destilería fueron habituales y que no hubo más impacto ambiental que el del ruido.
En primera persona Zulema Báez, una vecina de 48 bis y 129, conversó con este diario y relató su experiencia vivida: “Hace unos días que escuchamos que el ruido de la Destilería es más fuerte y no podemos descansar sin sobresaltaron; años atrás pasó algo parecido, pero después de que se hizo una inspección, las cosas parecieron mejorar”. La vecina cree que esto es temporal y que la solución podría llegar en cualquier momento.
Por otra parte, Cipriano Rojas – un vecino que vive en 48 bis y 129, explicó que en su hogar ya se acostumbraron a la situación, pero igual manifestaron que no se puede vivir con esa intensidad de ruido: “Aunque ahora el ruido es más fuerte que otras veces, es algo a lo que lamentablemente estamos acostumbrados; también notamos que las plantas se secan y los frutales se ponen negros por el hollín”.
Fuente: www.eldia.com.ar
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